A discussão sobre o uso (ou não) da pirâmide invertida no ciberjornalismo começou no congresso de Santiago de Compostela, em 2004, ganhou força aqui na blogosfera e agora é retomado por Carlos Castilho no Observatório da Imprensa.
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Daniela Bertocchi 
Dani,Muito oportuno o artigo de Castilho e as duas entrevistas (Rosental e Salaverria) que o complementam. Traçam um bom panorama dos principais argumentos e dos pontos de vista (opostos) em jogo. Vale retomar a questão.
Sérgio, penso que o debate deva continuar mesmo. A despeito de não ser uma questão super nova, ainda está verde em muitos aspectos. Vamos em frente. 🙂
Dani, Sergio e demais interessados,Esse assunto da pirâmide invertida deve esquentar mesmo, e com razão. Não me parece que devamos ser estritamente ortodoxos quando falamos de exercício do jornalismo nos meios digitais. Penso que tal exercício não devende de uma estrutura que inicie pelo lead, e siga ritualísticamente o que, quem, como, quando, onde e por que, como uma proposta fechada de oirdenação do texto.a web oferece a possibilidade de uma leitura paralela desta variáveis, que deve ser explorada pelo usuário.Seria muito importante que todos fizessem uma re-leitura dos textos produzidos por Salaverría para entender como suas idéias evoluiram desde a proposta do conceito de célula informativa e suas visões atuais sobre construção narrativa.Referência importante: Manual de Redacción Ciberperiodística, livro mais recente do professor.
En primer lugar, me gustaría decir que me ha sorprendido la forma en que el redactor de “Observatório da Imprensa” tomó libremente el comentario que escribí en Intermezzo y, después de traducirlo al portugués, lo publicó directamente en su Web. Me habría parecido más adecuado que me hubiera escrito y me hubiera formulado las preguntas pertinentes. Debo confesar que el comentario que escribí en Intermezzo fue un texto apresurado, y no estoy en absoluto satisfecho de su tono malhumorado. Me habría gustado expresar mis ideas con mayor sosiego y sin descalificaciones. Pido disculpas, por tanto, a quienes haya podido sentirse molestos por mi tono vehemente y por su contenido. Y, asimismo, lamento que ese comentario haya trascendido de tal modo a “Observatório da Imprensa” y se hayan convertido sin mi conocimiento en una materia de esa publicación.Dicho esto, me gustaría insistir en mis argumentos anteriores: la pirámide invertida es un formato muy adecuado para la redacción periodística. Eso nadie lo discute. Si lo que se pretende es una transmisión rápida de informaciones, es un formato especialmente adecuado, como han demostrado las agencias de noticias durante el pasado siglo XX. Ahora bien, la pirámide invertida sirve, pero no basta. Un entorno hipertextual como la Web reclama comenzar a utilizar unos formatos que aprovechen la posibilidad de fragmentar el discurso informativo, y de crear, por tanto, niveles de profundidad documental. Y la pirámide invertida, un formato intrínsecamente monolítico, no facilita precisamente esa labor. El problema es que, hasta ahora, los medios digitales se conforman de ordinario sólo con el primer nivel hipertextual, el más superficial, de esas informaciones. Y para ese nivel, sin duda la pirámide invertida es un formato adecuado. Sin embargo, es necesario que los cibermedios empiecen a comprender que es preciso ir más allá. Que existen lectores que no quedan satisfechos con un simple texto de 200 palabras y que, a propósito de ciertas materias, reclaman mayor profundidad documental y desarrollo narrativo. Es, precisamente, en estos niveles más profundos de las informaciones hipertextuales donde la pirámide invertida deja de ser válida como formato discursivo.Puesto que el debate está caliente, aprovecho para anunciar que, esta misma semana acabo de entregar a la Editorial EUNSA el original de mi próximo libro: Redacción periodística en internet. Este libro, que estará a la venta en las librerías españolas a finales del próximo mes de febrero, incluye un pormenorizado epígrafe donde analizo detalladamente todos los pros y contras de la pirámide invertida en la redacción hipertextual y examino, asimismo, los argumentos que se han esgrimido en los últimos años en favor y en contra de este formato discursivo. Ahora bien, ese texto -ahora sí– carece del acaloramiento de mi último comentario en Intermezzo, un texto por el que de nuevo pido humildemente perdón.
Prof. Salaverria (e todos),Precisando:Logo apos o meu primeiro post, percebi que me equivoquei em um detalhe importante ao comentar o artigo de Carlos Castilho. Estritamente falando, foi uma ENTREVISTA de Rosental e uma REPRODUÇÂO do artigo de Salaverria que acompanhavam o artigo de Castilho. Quanto ao conteúdo das questões em jogos, tendo a endossar a linha central de argumentação de Salaverria: “la pirámide invertida, un formato intrínsecamente monolítico” nao é a mais adequada para o texto jornalistico em internet.Estamos em um momento de transição dos formatos jornalisticos. Com os hiperlinks, a estrutura tradicional da notícia, consolidada ao longo do século XX, está em xeque. (Aliás, ainda que “hegemônica”, o formato pirâmide invertida nunca foi completa unanimidade mesmo no período “pré-digital”). Outras formas narrativas (jornalísticas) são possíveis. Enquanto as novas formas não se desenvolvem por completo e não ganham “corações e mentes” de editores, redatores e repórteres, as velhas formas ainda predominam. Seja por mera inércia, seja por falta de percepção das novas possibilidades digitais que se abrem.